16.12.16

Objetivos del año


Decíamos hace un dos años (siempre es lo mismo):
· Ampliar mis horizontes profesionales y académicos. Por fin pude sacarme el Máster de encima, con muy buen resultado: un diez del tribunal. De todas maneras, qué más da. Eso no me sirve para absolutamente nada profesionalmente.
· Sacar a la luz algún  proyecto literario o de cómic, en solitario o con otros creadores. He podido participar en una exposición colectiva, de la que se ha publicado catálogo), junto a dos dibujantes, Francesc Grimalt y Felio Brenes. Tengo en el aire una colaboración en la revista Deriva con la genial Loreto Aroca. He seguido haciendo algunas páginas de EJL con Bart, con el que tengo aún varios proyectos pensados.
· Cuidar bien de mi pareja y de mi hija. He sido incapaz de llevar bien mi relación de pareja y todo ha naufragado.
· Atender a mis amistades. He podido ver a mis amigos un poquito más que otros años, aunque tampoco demasiado. En la última parte del año he arrancado una Aula de Juegos en el colegio que me han proporcionado algo de distracción en este sentido.
· Hacer algo de ejercicio y bajar de peso. Desde septiembre he bajado casi 5 kilos y mi objetivo es seguir así indefinidamente, hasta alcanzar el peso que considero adecuado.

Objetivos de 2017:
· Publicar algún libro, cómic o página.
· Cuidar bien de mi hija.
· Atender a mis amistades (pendiente).
· Bajar y seguir en torno a los 70kg.
· Ser feliz.

29.10.16

Lecciones de tinieblas / Found no escape from the fatal injection of life

A veces, para llegar a cierta conclusión, basta con que un pequeño detalle sea observado de una forma insospechada para que todo cobre un nuevo valor. Cuando M., hace ya muchos años, me grabó una cinta con el disco de Elend Les ténebrès du Dehors, no podía sospechar nunca que, en suma, ahí estaba todo, oculto bajo un hermético disco de ambiente malévolo. El álbum se inicia de forma muy ceremonial, con unos coros y unos órganos que parecen elevarnos hacia el paraíso... para precipitarnos acto seguido en la vertiginosa caída de Lucifer. Desde el fondo del abismo, resonando con desesperación entre el coro angelical, se va alzando el grito desgarrado del Adversario, un grito que pone la piel de gallina, y en él se concentra todo el odio y toda la venganza hacia un Dios que tiene sus planes hechos de antemano y para el que sólo somos piezas de su juego. La rebelión de Lucifer es una reafirmación de la voluntad, de la existencia. No es celebrar el mal por el mal: Lucifer es otro Prometeo (Ihsahn lo sabía y le dedicó la historia del último álbum de Emperor: The Discipline of Fire and Demise) que ha plantado cara a los dioses, otro Ícaro que se precipita a la tierra por haber querido volar demasiado alto. En ocasiones como esta noche puedo entender el significado último de toda esta música construida a base de pura cólera, puedo sumirme en Thorns on my Grave y dejar que la canción me electrocute y me arranque la piel a tiras, sentir que esa rabia es también mía, mirar con los ojos inyectados de dolor al mundo y decirle cuando me hayáis destruido os pido sólo una cosa: que pongáis espinas sobre mi tumba.
[Originalmente publicada aquí en 2007, esta entrada estaba en borradores no sé por qué motivo. Vuelvo a subirla.]

25.10.16

No es nuevo; hace años que entiendo mi vida como una partida de Columns: una eterna lucha sisífica en la que constantemente van cayéndome encima tareas, trabajos, obligaciones, compromisos, deberes. Y no bien quito alguna de en medio que ya ha caído alguna más. Y, como un Atlas, intentar abastarlo todo, y como Sísifo, condenado a repetir ese esfuerzo hasta el infinito.

3.10.16

Cuanto más me hundo en el cieno de los años, más siento la necesidad de controlar una vida imposible de asir. Por eso, en un vano esfuerzo de demostrarme que vale la pena algo de lo que hago, organizo mil listas, contabilizo hasta el detalle más tonto de todo lo que hago. Recuento los libros que leo, las pelis que miro, las temporadas de series que termino, los pasos que camino, el sexo que tengo, las ferias a las que acudo, las veces que lleno el depósito, las ventas que hago, los posts que escribo... Porque necesito sentime útil, y esa sucesión de datos me dan la impresión, por un momento, de que estoy haciendo algo con mi vida, de que vale la pena seguir viviendo.

Suena: Katatonia - Unfurl.

13.4.16

Mecum omnis plangite

Todo volvía a empezar. Las sombras se acercaban. No soy capaz de amar. No soy capaz de mantener a alguien a mi lado. Hay algo en mí que es odioso pero que está muy al fondo, y que sólo puedes ver de cerca. Ahora sé que esto está condenado al fracaso, que estas grietas no se van a reparar, y que tarde o temprano estaré en la casilla de salida de nuevo, pero esta vez con el peso de la culpa de un inocente. 
No quiero perderla, pero la voy a perder. Siento un vacío y una desolación tremenda.
Nada es para siempre.
Me lo merezco por no estar atento a las señales.
Si ella no es feliz no la puedo culpar. Busca su felicidad.
¿Y la mía? Haber espabilado.
Te lo ha dicho muchas veces.
Ahora cualquier pequeña duda te duele.
La desconfianza es esa mierda tan poderosa que sientes subir por las piernas hasta temblar y ese hueco en el estómago que parece arder.
Y ganas de romper las paredes con los puños y morir.
Lo has vuelto a hacer, no eres capaz de mantener algo bueno. Te apalancas, eres un puto niñato. Cómo coño te criaron para ser así. Joder. Joder. Joder. JODER.
Mierda.
No puedo.
Necesito sacarlo. Quiero que se arregle. Quiero que volviendo de allí se mate con el coche.
Odio mi puta vida.
Mierda.
Joder.

Objetivos del año

Decíamos hace un año: · Dejar el tema académico . Centrarse en el cómic. Lo demás no tiene sentido. Publicar algo más de cómic. ¿Lo he c...