26.5.06

La victoria sobre el Tiempo

Revolvía entre mis fotos, pensando un poco los abismos que abre el pasado y se engulle sin reparos. En una de ellas, te contemplé y me maravillé de lo bien que la naturaleza había hecho su trabajo. Ni tan siquiera había tomado yo la imagen, fuiste tú sola; yo sólo la retoque y la puse en un determinado contexto. Ahí estabas: preciosa, radiante, sin parangón. Acababas de romper la barrera del Tiempo con tu belleza. Porque los años pasarán, nosotros pasaremos como si no hubiéramos existido, pero esa imagen quedará: esos ojos de Venus que miran descarados al espectador, esa media sonrisa que insinua una travesura, esa cabecera -lo sé, debilidad mía- de cama modernista... Esos 20 años de tu juventud quedarán para siempre. Y podrá pasar el tiempo, pero todos los que la vean pensarán lo hermosa que era la modelo que posó para esa foto, el amor que destila su mirada, sentirán el escalofrío del Arte sacudiendo todo su ser. Y cuando ni tú ni yo seamos las mismas personas que se conocieron (ya no lo somos, para qué mentir), y sus vidas les hayan llevado dios sabe dónde, esa imagen seguirá ahí, testigo de la única manera en que el ser humano es inmortal. Y pensaré que sólo por esa imagen valió la pena conocerte, quererte y finalmente dejarte volar libre.

Suena: Aphrodite´s Child - "Valley of Sadness".

10.5.06

Le voyant

Mientras, superficialmente, Rimbaud, se interesaba por la blasfemia y la obscenidad y su vida cotidiana era todo lo disoluta que sus humildes circunstancias le permitían, en lo más hondo de su ser buscaba algún medio para escapar a un mundo que le asqueaba; buscaba algún ideal en el que perderse y que le permitiera olvidarse de una realidad cuyas exigencias era incapaz de aceptar; buscaba algo que se apoderase de él y lo sacara de sí mismo, algo que iluminara todo repentinamente y llenara de significadola miseria que le rodeaba, algo incluso, que justificara la necesidad de esa miseria y le permitiese extraer oro del cieno.

Enid Starkie, Arthur Rimbaud

5.5.06

Un año de fuego y ceniza (2ª parte)

Volvía del trabajo, llovía y llegué empapado al coche. Cuando me estaba abrochando el cinturón y arrancando, me di cuenta de que estaba hablando solo. No es algo novedoso, claro, ni para mí ni para nadie. Todos hablamos solos, aunque quizá yo tienda demasiado a ello, pero en aquel momento sentí algo dándome cuenta de que hablaba solo. Allí, girando la cabeza para agarrar el cinturón, en el coche vacío, hablando en voz alta a un copiloto ausente, me di cuenta de lo estúpido que resultaba todo. A su modo, Fénix Negro ha sido durante este primer año como el confesor que no tengo, como la persona a la que dirigir tus inquietudes cuando termina el día y la noche te engulle. Testimonio de muertes y resurreciones, de fuego violento y abrasador, de ceniza calma y extinta: como debe ser, como fénix que es. Porque como fénix que también soy, muero y resucito por temporadas. No sé a dónde irán a parar estas páginas, no sé si habrá otro año, ni siquiera si habrá otro año de mí mismo, simplemente el tiempo pasa. Pasa y a la vez parece que no existe, que su espejismo se desvela y le vemos la cara a Dios. Quiero evitar las alusiones personales pero no lo consigo. Quiero tener algo que contar pero no lo tengo. ¿Hay que recapitular ante la vida?

P.d: Las personas que contestaron en el anterior test con la respuesta 4 y las bromistas que lo hicieron con la 6 pueden escribirme o dejarme un mensaje y quedamos. Yo invito.

Suena: Depeche Mode - "Enjoy the silence".

Objetivos del año

Decíamos hace un año: · Dejar el tema académico . Centrarse en el cómic. Lo demás no tiene sentido. Publicar algo más de cómic. ¿Lo he c...